REALIDAD NOVELADA DE UN AUTÓCRATA
por J.S.Zolliker


Tengo mi mente puesta en una meta. Soy el dueño de mi destino, humilde salvador de la Patria, nadie puede detenerme si puedo hacer que el pueblo se mantenga humilde y unido. No necesito dormir mucho, siempre he sido madrugador, intranquilo.
Nadie más sabe como hacerlo. La historia me puso en este lugar y en este momento por una razón, cumplir una meta: tomar el poder.

México necesita corregir el rumbo. Pero no seré yo un gobernante déspota, nunca lo he sido. Seré benevolente, cuidaré del pueblo, de la gente, nada y nunca en beneficio personal, no me gustan los lujos, el dinero no me tienta, los excesos no me convocan; nunca he hecho nada para mí mismo, sino por el beneficio de los demás.

Soy un gran estratega, que ha tenido que luchar contra los embates de terceros que siempre me han atacado; no siento culpa, el cariño de la gente del pueblo me conforta, ellos lo son todo para mí, de ellos tomo mi fuerza, ellos luchan, se organizan, me apoyan… ¿Qué más representación del cariño que me tienen cuando puedo alzar un dedo y dar una instrucción y en consecuencia el pueblo obedece?

En esta vida hay sólo buenos y malos. Y ante los malos hay que resistirnos: desobediencia civil pacífica, porque soy un líder responsable y no quiero dar excusas; “ni un vidrio roto ni una pedrada, sólo recurren a la fuerza los que no tienen la razón”, y yo –perdón, nosotros- tenemos la razón, ellos no. Ellos son los desfalcadores, los fraudulentos, los ricos y ambiciosos, los traidores a la patria; promotores de la privatización del petróleo, de la riqueza nacional, del oro negro de los pobres… Sí, no, no, no me contradigo. No es lo mismo lo que propuse yo a lo que proponen ellos.Ya sé que yo dije asociación y que ellos dicen los mismo, pero ellos quieren saquearnos, ¿me entienden?… No es lo mismo porque de origen somos di-fe-ren-tes ellos y yo. Yo soy bueno y quiero lo mejor para el país, ellos son malos y sólo buscan su beneficio personal y de los ricos extranjeros…

La patria no se vende(Foto en CreativeCommons por Santi LLobet)

Yo del pueblo soy su líder, humildemente me han elegido. A ellos no. Por eso, necesitamos iniciar la marcha, ni un paso atrás, tomar el hilo de la democracia para que no abusen de nosotros. ¿Qué pueden hacerlo porque ganaron las elecciones? No. Son un fraude, llegaron al poder con engaños, con ayuda de países extranjeros para vaciar nuestras arcas, no son demócratas ni México un país con democracia, pues de existir, habría ganado yo, digo, nosotros…

Lo que necesito ahora pues, es el poder para hacer el bien, quizás requiramos declarar un estado de emergencia, nos quieren saquear… Sí, sí, sé que Hitler, Musssolini, Simón Bolívar, Franco, Noriega, Aguinaldo, Nazarov, Garibaldi, y cientos de tantas otras figuras fueron dictadores en sus épocas, pero yo no pienso suspender las libertades civiles, ni reinar –digo, gobernar- por decreto, ni reprimir a mis oponentes, ni promover el culto a mi personalidad, ni tomar el congreso por la fuerza… No, eso no lo acepto, no me parece correcto.

No, no me contradigo. Déjenme hablar. Esperen, que si no me encabrono… Ahora sí, hablando nos entendemos. Aquí se trata como ya lo mencioné, de un Estado de Emergencia, es una situación especial; por eso tomamos el congreso… pretenden desvalijarnos cuando no estemos mirando, como cuando los amantes de lo ajeno despojan a una mujer que dejó descuidada la bolsa. Ellos, los que sirven a otros intereses, quisieron de pronto pasar la reforma energética sin avisar, rápido, por sorpresa… Gracias a unos cuantos fieles, nos les adelantamos, lo evitamos, avanzamos un gran paso en el terreno democrático.

Por eso se los digo, no fue una medida antidemocrática, permítanme hablar, eso, no, no, no, no me contradigo. Sí, somos minoría, pero no porque el Pueblo, sí, el pueblo entero, no haya querido que no fuéramos mayoría en el Congreso, sino porque nos robaron la elección y todos los que fueron electos en ese día negro para la historia de México, son ilegítimos.

Por eso, no, no, no, no me contradigo, el jefe de gobierno del Distrito Federal y los legisladores de mi partido que están como Diputados y Senadores, no son ilegítimos, porque ganaron por las buenas, pero ellos, los que son un puñado y manejan este país, se dieron cuenta de que si les hacían fraude también, esto se haría revolución de inmediato. Y que quede muy claro, les digo a todos, que fui sumamente responsable en contener el descontento del Pueblo, la toma de Avenida Reforma fue por eso, para calmar los ánimos… No, no, no, no me contradigo. Como el Presidente es espurio, yo ya sé que el Pueblo no lo respalda ni lo respaldará nunca. Por eso sé que aunque sólo contemos con el 28% del Congreso, el Pueblo nos apoya en su totalidad, con el 100 por ciento.

¿Qué cómo lo sé? ¿No han visto el cariño que me tienen? ¿No han escuchado cómo me aclaman? ¿No me han abanderado ellos y sólo ellos como el Presidente legítimo? ¿No hemos llenado el zócalo con las 200 mil personas –perdón, 2 millones de personas- que caben? Por eso lo sé, por eso lo siento, lo siento en el abrazo, en los aplausos, en los gritos y en el clamor que provoco. Por eso soy el Presidente Legítimo enarbolado por la voluntad del pueblo, de todo México, por eso y para constituir un gobierno que reestablezca el orden y la estabilidad, la gobernabilidad… No, no, no, no me contradigo, soy la opción para devolverle a nuestra querida patria, su esplendor. Pero nunca seré, y les doy mi palabra que siempre cumplo por más que se empeñen mis enemigos –perdón, opositores- en mostrarme contradictorio: Yo nunca permitiré que me llamen “Su excelencia, Presidente de por Vida, Jefe de las Fuerzas Armadas, Lord de todas las bestias de la tierra y de todos los peces del mar y Gran Conquistador del Imperio Norteamericano en América Latina y México en Particular”. ¡Jamás!… ¡Luchemos por nuestros ideales! ¡No perdamos contra los que nos quieren apachurrar¡ ¡Democracia para nosotros!, Ehem, digo, ¡para todos!

Video: Charles Chaplin, el Gran Dictador

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