Según Héctor Osuna Jaime, Presidente de la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel), los cambios realizados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación a su llamada Ley Televisa, son meramente “cosméticos”.
En particular, se refiere al cambio de algunos términos y preposiciones de la lengua, que en derecho y leyes, son vitales (tan lo son, que pueden marcar la incostitucionalidad de una ley como esta).
Así pues, en el programa de radio de Carmen Aristegui, dijo que es “cosmético” en lo que se refiere a la concesiones porque su propuesta decía: “la concesión será por 20 años” y la modificación de la corte dice: “la concesión será hasta por 20 años”.
Ahora resulta, que la única diferencia entre que “te lleguen hasta atrás” y entre “que te lleguen hasta por atrás”, es solamente cosmática…
Yo pregunto: ¿Dónde quedaron esos funcionarios de antaño que solían renunciar por dignidad?
También hay quienes opinan que la ortografía es cosmética y que da lo mismo escribir cajón con “J” que con “G”.
Ah pero allí alguna vez alguien ha dimitido por dignidad? Aquí creo recordar que una vez dimitió uno.
cajon con “g”… ja, ja, ja!!
por aca, en gringolandia…
nuestro “lider” (Bush) dijo #&*@ cuando pensaba que nadie lo escuchaba, pero todo mundo lo oyó…asi que ahora las leyes de comuunicación (FCC) permiten que los demas hagan lo mismo que él. qué tal, eh ; )
que tengas un buen fin de semana : )
recien encontre el siguiente enlace…
http://revolucionesmx.blogspot.com
¡Cosmética!
Supongo que el arquitecto Osuna (porque es un arquitecto metido a político que inopinadamente preside una agencia reguladora de ¡las telecomunicaciones!) tuvo que meterse a la política porque no tuvo éxito como arquitecto y no habrá tenido éxito – sigo suponiendo- porque nunca pudo comprender que un falso plafón es cosmético, pero los cimientos no lo son.
Ya en serio, después de haber sido exhibido como dócil empleado de las dos televisoras ¿tenía Osuna que seguirse exhibiendo diciendo sandeces y aferrándose a un puesto para el que es incompetente profesional y éticamente? ¡Qué capacidad de algunas personas para hundirse alegremente en la ignominia!
Es obvio que la lengua contiene precisiones muy sutiles y que, a diferencia de la cosmética, algunos cambios son cargas de profundidad. Saludos cordiales.
Si al menos la industria cosmética en México tuviera las regulaciones que tiene en Estados Unidos, podríamos estar más satisfechos con el empleo del término “cosmético” para otras cuestiones. Pero ni eso.
En cualquier caso, hay muchas cosas cosméticas en la política del país: la mayoría. jajaja.
Te ganaste un premio en mi blog. Pasa a recogerlo (recojerlo pues, porque se usan indistitamente).