Su esposo es un hombre importante, reconocido. Y ella lo sabe…
Viajar a Europa de compras cuando le venga en gana, visitar Australia varias veces al año para estar con los nietos, utilizar maletas Louis Vuitton que ni siquiera tiene que cargar ella, pasar semana santa navegando y encallar en Ibiza, compartir con artistas, cantantes, poetas homosexuales y sus mecenas, uno que otro aristócrata,millonarios de refinadísimo gusto. Chef particular, cava de vinos antiguos cuyos nombres ni siquiera logra pronunciar, conciertos todos los que sean y los que estarán.
Disfruta de cenar donde Almodóvar, no tener que mirar los precios en las cartas de restaurantes ni tener que recorrer tiendas para buscar la mejor oferta. Goza de poseer grandes, enormes colecciones de zapatos y conducir lujosos autos y camionetas. Le gusta organizar el fin de semana con amigos en Avándaro y protegerse tras guardaespaldas y seguridad, volar en avión rentado el fin de semana de compras a Miami o Los Ángeles cada que quiere comprar un vestido de noche para cualquier evento de la semana entrante, no recordar lo que es sufrir pagar colegiaturas, hidratar la piel con tinas llenas de agua ionizada embotellada.
Ella es la esposa de aquel reconocido hombre, servidor público, ladrón escrupuloso y amigo de todos los políticos que no han caído en desgracia, y nada más importa, mientras le permita portar un reloj de 400 mil pesos, rentar una sala de cine para las compañeras del club para no tener que compartir con los “apestosos”, ponerle aire acondicionado a las casas de los perritos o televisores de plasma para regalar en Navidad.
Esa es la vida que sólo tienen un centenar de personas en México y esa es la vida que ella posee, el precio al que ha decido vender su dignidad. Su esposo es un hombre importante, reconocido. Y ella lo sabe todo… Sabe cómo su marido es comprador de influencias, traficante de poder, "contratista independiente" cuando le conviene, manilargo, cuatrero asesino, expropiador de terrenos, obsequiador de dádivas, negociador en y de lo oscuro, dependiente sólo del más poderoso que él y de tus impuestos.
Y ella lo sabe todo, y todo se lo calla. Es representante ideal de la admiración ajena, mujer de éxito social, aparece en las portadas de revistas rosas, amiga de Norberto, benefactora de los Legionarios, la invitan a los brindis de todas las embajadas, miembro permanente de los mejores eventos, teje sus redes con esposas de otros políticos y, con su silencio al igual que otras, se ha convertido en cómplice de cada robo, secuaz de cada gota de sangre, implicada en cada estertor de llanto, convicta de la infelicidad de otros, culpable de la pobreza de tanta gente, enredadera de la marginación.
Sí, ha vendido su dignidad y honra a las andanzas de un grupo de facinerosos. Tiene miedo de ver a la gente a los ojos salvo que sean sus “iguales”, le horroriza sentirse rechazada, ansiedad de ser descubierta, no tolera estar con la gente pobre porque se siente automáticamente señalada. Y a veces lo recuerda y siente odio, odio a sí misma por no tener el valor de rechazarlo, de denunciarlo, de gritarlo, de escupirlo todo. Se aborrece a sí misma por hacerse de la vista gorda para la seguridad, para la vida gorda; el no cuestionar ni una sola vez de donde viene todo ese dinero. Y entonces rompe cosas, grita, se arranca el cabello, llora pensando en los más desdichados, se descalza… pero luego piensa en sus hijos que nada saben, en su postura social, en lo que ha logrado, en sus vecinos, en las envidias que ocasiona, y llega de inmediato la calma, respira profundo y acalla la conciencia con Tafil para dormir y Vodka para pasar el rato…
–Señora -le dice la cocinera del otro lado de la puerta- llamaron de México Honrado A.C. para confirmar su asistencia a la mesa de análisis del miércoles, ¿qué les digo?
–Que no se olviden de llamar a la Hola! para cubrir el evento, y que ahí estaré desde temprano – respondió – antes de quedarse dormida a medio día por efecto de las benzodiazepinas.
¿Y tu crees que su conciencia les habla alguna vez? Yo creo que se les fue de vacaciones.
La conciencia no les habla, es verdad, sólo les aprieta un punto más abajo del esternón, donde la angustia, y por eso necesitan drogarse, y les destila hiel en la boca, y por eso necesitan estirarse cada poco ese rictus de asco y de hastío.
Ah, José, este retrato te lo habría firmado Goya. Qué bueno eres a veces, qué insuperable.
Gracias.
José:
Hacerse de “la vista gorda” para seguir alimentando una “vida gorda”. Exacta descripción del horror. ¡Qué pesadas alforjas de culpas, olvidos, vértigos mentales, concesiones abominables, cargan algunas y algunos! Son nuestras Emmas Bovary a la busca de un Flaubert que las retrate…Me parece que tú, José, tienes un bisturí narrativo tan filoso como el de Flaubert. Emma Bovary termina quitándose la vida porque no logró trepar hasta la cumbre (con la maldición de que siempre hay una cumbre más alta, siempre hay otro piso imaginario que le falta a la casa para ver si así se sacian las hambres de trepar)…esta Emma Bovary local, que dibujas tan bien que juraría haber visto su fotografía en el suplemento Club Social del periódico Reforma o en alguna publicación parecida, se mata de a poquitos…o elude la confrontación en alguna aventura, con más pena que gloria, en que se desquita secretamente del marido poderoso poniéndole unos cuernitos…Espléndida narración. Felicidades. Tan buena que me siguen los escalofríos y un regusto de asco en la boca.
Está bien, existen muchas mujeres así, solo que difícilmente tienen problemas de conciencia, no los conocen ni por olor. Le voy a contar mi experiencia.
El otro día venía de Mazatlán, estaba sentada al lado de una muchacha joven, muy guapa, con un problema, traía pulsera en el tobillo. Bueno, todo bien, hasta que me preguntó por mi anillo de sello familiar y empezó a preguntarme ¿ya sabe que hay una tienda Vuiton en México? Qué bueno ¿no? Yo ya compré todo mi Kit. Estoy preocupada por mi perrito ¿Usted cree que tenga miedo? Nunca se separa de mi. Me enseñó la pulsera y el anillo que su esposo le acababa de comprar en una de las joyerías más caras de Mazatlán. Estaba encantada. Hasta que le pregunté en que trabajaba su esposo ¡Ah! Es policia de caminos en Nayarit.
Lindo ¿no? seguro es de los que cuidan que llegue todo bien los narcos.
DESAFORTUNADAMENTE HACI ES LA VIDA DE MUCHAS MUJERES Y DE HOMBRES EN LA POLITICA Y EN OTROS ANVITOS.
ESTE TIPO DE GENTE NO TIENE CONCIENCIA, NI CONOSE QUE ES LA HONESTIDAD.
EL DINERO LO ESTODO PARA MUCHA GENTE, Y MIENTRAS MAS TIENEN MAS QUIEREN Y NO LES INPORTA DE DONDE VENGA, MIENTRAS SATISFAGA SUS NESESIDADES.
Pepe:
Dramático y descarnado. Lamentablemente cierto. Qué pena!
Saludos. MUNDO.
Pues no sé, se me viene a la mente Doña Sasha, Doña Esther de Echeverría, Doña Sharon de Azcárraga… Chales.
La verdad, que difícil vidita, teniendo todo y nada ( y creo que tienen más la parte de la nada ), pues lo grabado en el alma se lo llevan, y sus jaladas que coleccionan aquí, aquí se quedarán. Además es puro show sabrosísimo, pues es cierto, los cuernos están a la orden del día, y las historias para saciar muchas de las cosas que no pueden cubrir con la couta que les da su ” hombre importante”
El día que la venus vendió su alma al diablo por un anillo de brillantes! Saludos José.
José, es la primera vez que se aleja de la realidad… generalmente tus relatos tienen muchas “coincidencias”, pero personalmente creo que las personas que venden su vida, por lo que tu describes como lujos, no tienen una coinciencia que les recuerde en las noches que existen pobres, o que son malas personas, creo que más bien, se sientan en su pequeña montaña de pensamientos contrariados, y voltean hacia abajo para recordarles a aquellos no tan aventajados economicamente, que ellos son más que cualquiera, les recuerdan que el poder y el dinero son las dos cualidades que los hacen sobresalir socialmente, y se sienten orgullosos de ello. Desafortundamente, esta sí es una realidad novelada.. no creo que exista dicha conciencia y bondad en ese tipo de personas, no se prestarían para ello. Felicidades, porque representas muy bien los lujos de aquellos que aprovechan una posición política, y felicidades por tratar de hacerla más suave con un poco de humildad en la historia que nos cuentas.
Genial, realmente lo pude imaginar y contemplar. Creo que la conciencia es muy dificíl de formar y muy fácil de deformar. Saludos.
Lo peor de todo es que hay un buen de gente así.
estas mujeres, lo siento, son “compradas”!
estan ahi, por amor al dinero (y lo que se consigue con ello), posicion/estatus, y convenencia…claro, sin conciencia!
quiero darte las gracias por el enlace a “good reads”- lo encuentro MUY interesante : ) gracias!
un fuerte y caluroso abrazo.
bendiciones,
coco
MORGAANA: Se les fue de vacaciones y no ha vuelto, pero de repente les envía uno que otro telegrama que las pone en serios problemas 😉
GATOPARDO: Agradezco tus palabras! Me honran (a veces ;))! Y dondé quedó la nieta?
RICARDO MEDINA MACIAS: Que delicia que te haya provocado ese mal sabor de boca, pues quiere decir que logró su cometido. Ahora, esperemos que podamos dejar de ver como admirable, cosas y personas que en realidad no lo son, no es cierto? Un abrazo!
MARGARITA RUIZ DE VELASCO: Qué gusto leerte! Efectivamente, problemas tenemos cuando socialmente es más admirado tener ciertas poseciones de marcas, que una carrera intachable…. y más tratándose de un policía. Horror!
ITALIA: Gracias por el comentario! Y sí, el dinero lo es todo para muchos. Y no le vería problema salvo que para muchos, no es criticable la fuente de ese ingreso, no es cierto? Por mí que existan muchos ricos, muchísimos, pero no ladrones. Que esos, se extingan!
MUNDO: Muy cierto, es una pena. Pena para nosotros todos, que lo aceptamos y los permitimos, que compramos esas revistas aún cuando sabemos de donde viene ese dinero manchado de sangre… Un abrazo!
XOCONOSTLE: Que conste que yo no nombre a ninguna, eh?… Un abrazo quitándole la K.
JORGE: Eso es cierto, de vida no tiene nada, salvo que viven, y comen, y roban, y lloran de vez, muy de vez en cuando. Pero aún así, prefiero la justicia en terra 😉 Un abrazo!
ACACIA9 Brillante comentario 😉
CAROLINA: Gracias por el comentario! Aunque de verdad creo que algunas de “esas”, de vez en cuando, tienen conciencia…aunque sea por telegrama… y la acallan, y muchas terminan enterradas jóvenes… Algunas más, como bien dices, ni si quiera conocen la palabra, y viven haciendo sus tropelias y cuatrerías por muchos años, enseñando también a su decendencia hacer los mismo; ahí que sea importante que dejemos de admirar, como pueblo, a esos ídolos inmerecidos, no crees? Muchas gracias por la crítica!
COVI: Qué bueno que has vuelto a comentar, tu blog ha resultado refrescante… y como bien dices, cuesta mucho formar, poco deformar… generaciones vienen, generaciones van, pero porqué en México especialmente sufrimos una y otra vez de estos “seres” y no les hacemos nunca justicia cuando se debe? Un abrazo!
TU POLITÓLOGA FAVORITA: Demasiada, diría yo. Demasiada.
COCO: Compradas y vendidas, al mejor postor don dinero no importa de donde vengas… Triste, no es cierto? que valga más tener mucho, que tener bien ganado? En fin, un gusto leerte y espero que pronto hagamos buena red social en goodreads. Saludos!
Interesante lugar, nos veremos por aquí muy seguido…
GinaHalliwell.com
José:
Impactante relato… ¿sabes a quién me recuerda?, a nuestra querida Cecilia Bolocco… es exáctamente el mismo perfíl, esa necesidad enfermiza de hacerte y sentirte importante, mujeres que sin escrúpulos avanzan por la vida, peldaño por peldaño, pisoteando a medio mundo, metiéndose al bolsillo incluso, sus propias vidas. No importa nada, ni familia, ni valores, ni orgullo, sólo hay que avanzar. La verdad es que no siento pena ni lástima por este prototipo de féminas, al contrario, una rabia parida. ¡Cómo es posible que existan mujeres tan estúpidas!, y sabes, a veces me avergüenzo de ser mujer, cuando escucho o leo todas las bajezas, a las que son capaces de llegar algunas, a cambio de ser “alguien”. Yo también soy ambiciosa, pero todo tiene un límite, y el costo que se puede llegar a pagar, es aún más indigno.
un abrazo cariñoso,
Después de tantos y tan buenos comentarios ¿que podría agregar? Tal vez señalar nombres, lo que no haré siguiendo tu buen tino.
Me encanta encontrarte con realidades noveladas como estas y tú mismo conoces el alcance a través de tus lectores.
Va para tí mi abrazo de tía orgullosa querido sobrino