El mundo de los negocios es muy justo. Reconoce a quienes lo merecen, ganan los que más trabajan, los que arriesgan, los que invierten. Me quito el sombrero, y le mando un abrazo a mi amigo Eduardo Arcos. Bien se lo tienen merecido, él y su equipo.

If you enjoyed this post, make sure you subscribe to my RSS feed!